Mes: noviembre 2010

Asesino en serie, de Otto Fernández

Breve relato del exterminador de termitas. Quién se iba a imaginar que aquel tierno anciano, de pelo blanco, chaparro y bonachón, de ojos cansados por el peso de los años, fuera el asesino más cruel y despiadado sobre la faz de la tierra.

Lee mas

Carta sin remitente, de Oxwell Lbu

Si me recuerdas…Con tu mirada inquisitiva me preguntarás ¿Por qué te escribo? Y la verdad es que no sé, ni que responderme a mí mismo… Mas te diré que apresar del tiempo no he logrado dejar tu recuerdo en el cementerio del olvido.

Lee mas

La inútil pena de muerte, de Carlos Figueroa Ibarra

Hace unos días el presidente Colom le cerró una vez más el paso a un proceso que buscaba reactivar la pena de muerte en Guatemala: vetó el decreto mediante el cual el Congreso buscaba darle nueva vigencia a la pena de muerte con la reavivación del indulto presidencial. Decisión que resulta congruente con los propios decires del presidente y con los convenios internacionales que Guatemala ha firmado, entre ellos el Pacto de San José

Lee mas

Carlos Figueroa Ibarra, autobiografía mínima.

Nació en la ciudad de Guatemala el 5 de agosto de 1952. A los dos años de edad, en 1954,  salió con su familia para acompañar a su padre quien había salido al exilio con motivo del derrocamiento del gobierno de Jacobo Arbenz Guzmán. En septiembre de 1958 su familia regresó a Guatemala por lo que tuvo oportunidad de vivir en el país hasta los 17 años de edad. Fue en enero de 1970 cuando  sus padres lo enviaron a estudiar a la Universidad Nacional Autónoma de México. En la UNAM  estudió la carrera de sociología en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales  en donde obtuvo la licenciatura en

Lee mas

Cortejo en las calles (Cámbiame un 21), de Oxwell Lbu

El aroma de las flores se podía respirar por aquellas calles, donde los muchachos en las esquinas se reunían, para ver a las muchachas pasar o simple y sencillamente para conversar, de vez en vez más de uno, se iba sin despedirse del grupo, tras la chica que le quitaba el sueño y que poco a poco

Lee mas

Ángeles exterminadores, de Mario Roberto Morales

Forma parte del mejor sentido común la noción de que quien bestializa al prójimo se bestializa a sí mismo; pues ―dada su naturaleza moral― ningún ser humano puede denigrar a otro sin degradarse él también. Quedar indemne de semejante acción implicaría pertenecer a una estirpe superior a la de los mortales. Y aunque amar al prójimo como a uno mismo resulte una tarea titánica debido a la baja autoestima con la que gran parte de la

Lee mas

Vientos de vacaciones parte III, de Oxwell Lbu.

Durante el día las patojas y patojos eran los reyes de las calles, estas eran inundadas no solo por sus juegos, también por sus carcajadas y esa alegría que todo lo pinta de colores. Pero al caer la tarde, uno a uno los enamorados empezaban a sumarse…Parejas tomadas de la mano, otros esperando a la novia en la esquina o en una estación de autobús, otros regresando junto a los adultos después de una jornada de trabajo. Al tenderse el manto de la noche, el cielo se tapizaba de estrellas y en el firmamento se veían las montanas y el coloso volcán, en el cielo la luna con la cara tiznada miraba a las parejas de enamorados y a los que recién despertaban a esos llamados de la vida, que los sacaba de su guarida y los hacía ir de casaría, recorriendo las calles de la colonia.

Lee mas

Hoy me acordé de ti, de Sócrates.

Hoy me acordé de ti Recuerdo tus ojos color de miel Tus labios rojos como una fresa Tu corazón palpitar junto al mío. Hoy me acordé de ti Recuerdo tu sonrisa siempre alegre Tus besos sabor a chocolate Tus manos suaves como la...

Lee mas

Vientos de Vacaciones, de Oxwell Lbu

Los patojos contaban los días, las horas y algunas hasta adelantaban el reloj para ganarle tiempo al tiempo, comiendo ansias por salir de vacaciones y dejar atrás los horarios, las tareas y ese monstruo que se agiganta cuando llegaban los exámenes de finales de año.

Lee mas

Diccionario Dixio

Nos leen en:

Historial de Artículos