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Recortes de Viaje

Sin duda, no pudo haber sido éste el mejor momento para que estos versos salieran a tomar el sol.

Irmalicia Velásquez Nimatuj

La poesía nos lava el alma, nos escurre la fatiga, ensuavece el barro que pisamos en momentos en que sentimos que la cima, por más que caminemos se aleja como una cúspide inalcanzable, tan dolorosamente lejana que nos provoca rabia pero al mismo tiempo nos desafía a retarla. Es en esos momentos cotidianos o esporádicos de nuestro existir que necesitamos de la prosa para sentir que respiramos, para sentir que seguimos vivos.

¡Qué sería de nuestra existencia si no pudiéramos pedirle a la poesía que nutra nuestro ingenio, que recargue esa fuerza interior tan mancillada que llevamos dentro o a flor de piel por la ignominiosa realidad! ¡Por tanta miseria, robo o cinismo al que como género humano nos estamos condenando! Hay que gritar poesía, hay que gritar vida para no terminar sucumbiendo ante la indiferencia o el suicidio.

En medio de este inframundo nacional vio la luz el reciente material del poeta quetzalteco Carlos H. López Loarca, titulado: Recortes de Viaje. Con esta publicación este médico-poeta o poeta-médico consolida su aporte a las letras nacionales. Al mismo tiempo nos obliga a detenernos para percibir que la vida no puede quedar en simples notas sino que la unión de múltiples pasajes o recuerdo de viaje, son los que hacen la vida y delinean el destino, que no está en el futuro sino en el hoy, en este preciso momento en que leemos y respiramos.

A través de 56 poemas que se enredan en 68 páginas, López Loarca nos recuerda que la vida emerge de pueblos que vienen de tiempos posteriores, en donde los espejos no hacen sino advertirnos que hay que amar como troyano, en cualquiera de las múltiples esquinas que terminan remitiéndonos a rocíos de septiembres, en donde quedan no recuerdos sino pasos que se diluyen en indiferencia frente a la soledad de los amores, de los amigos, del engaño, de las mentiras, de la espera y hasta del mercado que nos convierte en simples alfileres que acaban siendo vendidos en ferias coloniales.

Fuente: [https://elperiodico.com.gt/opinion/2017/07/29/recortes-de-viaje/]

Narrativa y Ensayo publica este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Irma Alicia Velásquez Nimatuj