Hoy, no parezco yo;
me siento en el limbo,
en una encrucijada que me hace temer
volver al camino de angustia que ya recorrí;
pasar por parajes umbríos en mi derredor
en donde me acechan los monstruos que me hacen sufrir,
que muerden, que arañan, que quitan la vida en un parpadear.
Hoy, no parezco yo;
ayer me sentía valiente al andar
creyendo que nada podía volverme hacia atrás;
que todo se hallaba guardado en el fondo del mar,
pero era mentira todo era igual,
recorrer nuevamente los pasos que dimos en pos
de metas, de sueños, trazados por vos.
Hoy, no parezco yo;
mientras busco salida a esta situación
que pone en gran riesgo mi estabilidad
le pido con fuerza y con fe a mi Señor
que abra mis ojos para poder ver la luz.
Que cuide mis pasos y mi despertar;
que tome en Sus Manos mi pesada cruz.
Hoy no parezco yo;
me faltan las fuerzas para caminar
pero, si me quedo aquí quieta dejándome estar,
podría una ola llevarme hacia el mar.
Hoy no parezco yo;
y aunque débil a veces me pueda sentir
jamás por el suelo me voy a quedar
los monstruos que acechan los voy a vencer;
como el ave fénix de cenizas saldré
aunque haya carbones que atrapen mi ser.
Una y mil veces podría caer mas otras, y una, me levantaré.
- Y cómo no…, de Georgina Palacios - 4 abril, 2013
- Nostalgia, de Georgina Palacios - 3 abril, 2013
- La margarita, de Georgina Palacios - 3 abril, 2013
Comentarios recientes