Antojitos chapines…Humo en tus ojos. De Oxwell Lbu

Comer en la calle, siempre tiene otro sabor… Un encanto que quizás solo las mamas pueden explicar. Porque resulta que cuando los patojos comen en la calle la comida no alcanza y lo que en casa les parece un purgante en la calle les sabe a manjar…