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Arranca

con tu lengua

elocuente

cada vertical

negra

de tu prisión

la verdad

está en el origen

nadie sabe su final

acaricia el suelo

y la arcilla

con el corazón

y que el jazz

percuta

tu caricia

en el reflejo

pintando

en bares

obscuros

su canto

acompasado

en ese mismo

sótano del piano

y que el psicólogo

sirva los tragos

con su corbata

para que en tu terapia

se absorba la fiesta

inyectada

a tus venas

y si en tus rondas

te dijeren loco

escúpeles

esa tu verdad

porque ella

esta en el origen

y nadie sabe su final