Ayúdanos a compartir

Mendigos perpetuos

Demandemos castigo ejemplar para los responsables de estos actos inhumanos.

Irmalicia Velásquez Nimatuj

¿Cómo esperar que avance la lucha contra la desnutrición o el hambre en las comunidades rurales –que en su mayoría son indígenas– sí los programas y fondos del Estado, creados para atender estados de calamidad o programas de corto o mediano plazo para enfrentar estos flagelos solo han servido como fachada para drenar los fondos públicos o de la cooperación internacional y enriquecer los bolsillos de la clase política que se alterna el gobierno?

Esto evidencia el caso de El Bodegón en donde desde el exministro de Agricultura Elmer Alberto López Rodríguez y otros funcionarios abusaron de mujeres, hombres, ancianos, niños y niñas quienes ante la pobreza extrema en que el sistema nacional los coloca terminan aceptando migajas de programas sociales que en lugar de alimentarlos, los mata. Que en lugar de darles dignidad los victimiza y los mantiene en situación de dependencia.

¿Qué tipo de profesional es Elmer López que sabiendo que el maíz no era apto ni para consumo animal permitió que se distribuyera a familias pobres? ¿Le daría él de comer a ¡su propia familia esos granos?

Ante esta maquiavélica revelación pregunto: ¿En qué universidades se formó Elmer López? Porque además de juzgarlo y castigarlo a él y a todos los responsables por envenenamiento, asesinato y homicidio culposo, las universidades deben desconocerlo como profesional porque no se estudia –en un país profundamente desigual– para planear cómo matar a sus semejantes que viven en pobreza para luego distribuirse millones de quetzales de
impuestos directos e indirectos que paga el pueblo o de donaciones internacionales que sostienen al Estado.

Demandemos castigo ejemplar para los responsables de estos actos inhumanos. ¡Basta de seguir abusando de las poblaciones marginadas! ¡Basta de continuar asumiendo a los pueblos indígenas en extrema pobreza como mendigos perpetuos! Este caso, también, debe llevar a las comunidades a castigar a sus líderes que han negociado con estos gobiernos y deben liberarse del yugo de las limosnas.

El Bodegón es un ejemplo de cómo la vida de los indígenas –por ser indígenas– no fue valiosa en el gobierno de Pérez y Baldetti, por eso, permitieron y fomentaron que se les alimentara con maíz con moho, gorgojo e insecticidas.

¿Qué tipo de profesional es Elmer López que sabiendo que el maíz no era apto ni para consumo animal permitió que se distribuyera a familias pobres? ¿Le daría él de comer a ¡su propia familia esos granos?

Fuente: [www.elperiodico.com.gt]

Narrativa y Ensayo publica este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Irma Alicia Velásquez Nimatuj