Ayúdanos a compartir

Irmalicia Velásquez Nimatuj

Analizar la gestión de Jimmy Morales durante 2018 no es difícil, al contrario, es una tarea que da pena y vergüenza al revisar que el país entró en un retroceso en materia del manejo público, porque no cumplió con el mandato que le corresponde, sino que utilizó su raquítico poder enfocándose exclusivamente en la destrucción de la Comisión Internacional Contra la Impunidad, CICIG. En esa lucha invirtió Morales nuestros impuestos directos e indirectos, que son los que pagan a los funcionarios del Ejecutivo, Legislativo y Judicial que están ahora al servicio del empresariado expoliador, del crimen organizado y de los corruptos militares.

La ausencia de un liderazgo nacional ha sido de tal magnitud que ante la incapacidad de Morales por gobernar, miles de guatemaltecos se unieron al éxodo, nunca antes visto de hondureños y salvadoreños, pero esto a Morales y a su canciller Sandra Jovel no les importa, en parte porque disfrutan de su condición de clase mediera arribista, la cual les impide poseer las condiciones analíticas mínimas para comprender y enfrentar con políticas realistas las causas estructurales que provocan la imparable expatriación que ha cobrado la vida de dos niños en manos de la Patrulla Fronteriza estadounidense.

Frente al asesinato de activistas, mujeres y hombres la mayoría indígenas, y la persecución, juicios viciados y encarcelamiento de líderes que demandan el respeto a sus hogares y territorios, Guatemala retrocedió en materia de Derechos Humanos. En lo económico, Morales termina como un servil alfil del CACIF y un verdugo de las clases trabajadoras a quienes congeló los salarios mínimos para 2019. ¡Histórico, Morales con una gestión de -1, devenga Q146 mil mensuales pero a firmado que el salario del campo y la ciudad se mantengan en Q2 mil 954.80 mensuales. Y en las maquilas y call centers en Q2 mil 723.80, cuando el precio de la canasta básica supera los Q3 mil 609! O sea, Morales, sin gobernar para el pueblo, gana mensualmente más de 53 salarios mínimos ¿Cómo no van a migrar o incorporarse al crimen organizado desde los niños hasta los ancianos?

Qué decir de la imparable violencia y del abandono de carreteras, hospitales o escuelas. Y de la corrupción que no cesa bajo este gobierno.

Fuente: [www.elperiodico.com.gt]

Narrativa y Ensayo publica este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Irma Alicia Velásquez Nimatuj